02 junio 2011

Fragmento de "El oscuro" (Daniel Moyano).


Uno es finalmente un contorno que contiene una sola vida y una sola muerte. Es una especie de cárcel donde está condenado a vivir y a morir. Pero hay algo que lo salva a uno cuando uno presiente la existencia total de otro ser (su contorno y lo que contiene), y siente de pronto que ese otro ser responde, y entonces los contornos, tocados por el amor, se unen y sienten que ya no son un solo contorno, una sola cárcel, sino que participan de la maravillosa multiplicidad.

Alguien se ha abierto.

Bel dijo...

Hermosas palabras, hermosa imagen. ¿Cómo no abrirse así?