20 julio 2009

Fragmento de "Matar un ruiseñor" (Harper Lee).



Atticus Finch no hacía nada que pudiera despertar la admiración de nadie: no cazaba, no jugaba al póker, no pescaba, no bebía, no fumaba...
Se sentaba y leía.

Alguien se ha abierto.

Lunhe dijo...

Curioso texto el que nos traes. Breve, conciso... Me gusta.
Besicos.