07 octubre 2008

Fragmento de "El carnicero" (Alina Reyes).

Esto lo he robado de Anaïs.


Yo no hacía nada. Me mantenía erguida en mi taburete alto. Sólo escuchaba.

Y sabía que, a pesar mío, él notaba cómo crecía mi deseo al compás de sus palabras, conocía la fascinación que en mí ejercían sus frases dulzonas:

- Apuesto a que tus braguitas ya están húmedas. Te gusta que te hable, ¿eh? Te gustaría gozar sólo con palabras… Tendría que seguir diciéndote cosas todo el tiempo… ¿Ves? si te tocara sería como mis palabras… Por todas partes, suavemente, con la lengua… Te tomaría en mis brazos, haría contigo todo lo que deseara, serías mi muñeca, mi pequeña a quien mimar, y tú quisieras que no se acabara nunca…

3 se abrieron.

Puta se nace dijo...

Gracias por tu visita

Vicent dijo...

¡Excelente Alina Reyes! El Carnicero fue el primero que leí de ella.

Y aprovecho para felicitarte por la selección de textos e imágenes de tu blog. Asiduo visitante, disculpa que no firme con más frecuencia.

ALMA dijo...

me estremeci...

un beso....infinito...



ALMA